jueves, 22 de septiembre de 2016

LOS HERMANOS

Probablemente los hermanos sean de las personas que más huella nos dejan. Compartimos la infancia, la adolescencia, cambios evolutivos, decisiones, aprendemos a compartir…crecemos “paralelamente”.
No resulta extraño que esta relación suponga un modelo para el resto de relaciones que tenemos a lo largo del tiempo.
Una cuestión muy habitual es cuando el hijo mayor deja de ser el centro de atención porque ha nacido su hermano, ¿qué se supone que pasa ahora? ¿Cómo se lo va a tomar? “Le veo diferente”…son algunas de las dudas más frecuentes. Pues sí, no os cuento nada nuevo si decimos que esta nueva situación puede originar celos entre los hermanos.
La relación que tienen los padres entre sí y con los demás influirá en la relación entre los hermanos. ¿No habéis observado como en las familias tiende a repetirse las formas de relacionarse generación tras generación? Sí unos abuelos tienden a reunir todos los domingos a toda la familia para comer, probablemente esta tradición la continúen sus hijos, los hijos de sus hijos…
Por otra parte si los padres son capaces de resolver los conflictos entre sí de manera positiva, transmitirán a sus hijos formas parecidas de actuar.
Resulta habitual si leemos cualquier estudio psicológico observar que los padres no suelen hablar de emociones a los hijos en la primera infancia, bajo estas circunstancias los hermanos más pequeños podrían buscar a los mayores a la hora de resolver algún tipo de conflicto.
Y vosotros,¿Qué opináis de la relación entre hermanos?

“La vida no es la que uno vivió
sino la que uno recuerda, y
 cómo la recuerda para contarla”
Gabriel García Márquez
Ana Madueño

Psicóloga