Sí hace unos meses
hubiéramos dicho que los Pokemon iban a volver a estar de moda, que íbamos a
estar “buscándolos” por la calle o que incluso habría algún que otro “percance”
cualquier de vosotros hubiera dicho… ¿yo? ¡Jamás! Pues sí…ha llegado una nueva
¿revolución? Llamada Pokemon Go! Y no…no es para niños, podemos andar por las
calles de nuestros barrios o centros urbanos y encontrarnos a personas de
diferentes edades, sexos o culturas con el mismo fin…Móvil en mano ¡cazando!
Pero ¿Cuáles son las
claves desde el punto de vista psicológico para que dicho juego haya alcanzado
los niveles actuales?
Lo familiar, es imposible
hablar de Pokemon Go y no recordar que cuando éramos niños ya existía el famoso
Pokemon, y sobre todo, como era valorado positivamente. Cuando somos niños, la
mayoría, tendemos a estar alejados de los problemas, con lo cual cualquier
elemento que nos recuerde a nuestra infancia nos hará valorarlo positivamente y
asociarlo con aquella etapa, resultándonos creíble puesto que lo conocemos a
través de las series televisivas. A todo
esto hemos de añadirle los distintos niveles de dificultad que van apareciendo
a medida que más tiempo le dedicamos o la competencia.
Lo social, la influencia
social, aspectos como la validación (estamos más dispuestos a comprar aquello
que compra la mayoría porque son más similares a nosotros). Necesitamos
interactuar con los demás, en muchas
ocasiones la aprobación del resto, hacer lo similar o sumarse a la moda resulta
imprescindible para que determinadas personas se sientan socialmente
integradas.
¿Qué pueden hacer los
padres respecto a esto? Un aspecto muy importante que han de realizar de mutuo
acuerdo con los hijos es establecer una serie de compromisos, tales como el tiempo de juego. Desde hace
tiempo los servicios médicos vienen alertando de los peligros que conlleva el
uso prolongado de dichos dispositivos, y no solo a nivel ocular. Aspectos
psicológicos como mayores niveles de ansiedad o irritación pueden desencadenar
una dependencia de dichos instrumentos.
Y… ¿Cuál es vuestra
experiencia? ¿Qué opináis de este nuevo fenómeno?
“Si quieres vivir una vida feliz, átala a
una meta, no a una persona o a un objeto”
A. Einstein
Ana Madueño
Psicóloga