miércoles, 3 de octubre de 2018

PERIODO DE ADAPTACIÓN

PERIODO DE ADAPTACIÓN
¡Es miércoles, así que…volvemos a estar por aquí!
Hoy os traemos la respuesta a varias preguntas que seguro que os hacéis cuando se empieza un nuevo curso. Sí, es verdad, ya estamos en octubre…pero, ¿Nos hemos dado cuenta ya de qué es y lo que implica el período de adaptación?                                                                            Y…sobre todo, lo más importante: ¿Por qué es tan difícil para los más peques de la casa?
¡Os lo contamos a continuación!
¿QUÉ ES EL PERIODO DE ADAPTACIÓN?
Al iniciarse en la escuela infantil, el niño necesita un periodo de tiempo para asimilar los diferentes cambios a los que de repente se tiene que enfrentar. Este periodo de cambios implica pasar de un entorno conocido, a un entorno en el que el ambiente es totalmente diferente y nuevo para él.
Esto supone un gran esfuerzo para el niño, mediante el cual finalmente conseguirá aceptar internamente esta separación del entorno familiar.
¿QUÉ LE PASA A MI HIJO?
Durante este período el niño puede manifestar sentimientos de pérdida y ganancia, es decir:

v  Por un lado, experimenta emociones positivas, al disponer de un espacio adaptado a ellos y lleno de juguetes en el que tiene la oportunidad de hacer nuevos amigos.

v  Por otro lado, experimenta emociones más difíciles de aceptar, pasando por un sentimiento de angustia a la hora de separarse por primera vez de sus papás, dejando de ser el protagonista para formar parte de un grupo en el que tiene que compartir la atención que recibe.

¿QUÉ COMPORTAMIENTOS MANIFIESTA?
Estos cambios pueden producir regresiones y es frecuente que los comportamientos que ya había superado anteriormente vuelvan a manifestarse, es decir, es frecuente que los niños vuelvan a chuparse el dedo, a hacerse pis, a demandar mayor atención de la que están acostumbrados…
También es común que el niño exprese sentimientos a través de manifestaciones conductuales indirectas:
v  A través de cambios físicos, como por ejemplo: vómitos, diarreas, alteraciones del sueño…
v  Cambios en su conducta como mostrar agresividad e inhibición, siendo frecuentes las rabietas.
¿QUÉ PODEMOS HACER COMO PADRES?
v  Debemos ser positivos.
v  Mantener una actitud de seguridad y confianza en los educadores y en nosotros mismos.
v  Respetar las normas y reforzar el trabajo educativo.
v  Colaborar con la escuela.
v  Evitar las comparaciones.
v  Ofrecer apoyo, ayuda y afecto al niño/a.
v  Asistir de forma continua empezando por pocas horas que irán aumentando progresivamente.
v  Procurar que las despedidas sean cariñosas pero breves, evitando gestos de preocupación o pena.

*Recuerda: lo primordial es el bienestar del niño y es muy importante hacer todo lo que esté en nuestras manos para conseguirlo, respetando siempre su ritmo y teniendo presente sus sentimientos y emociones.
                                                                                                            

                                ¡Feliz Semana

Alicia Jiménez
Educadora y Maestra de Infantil

miércoles, 26 de septiembre de 2018

En nuestro gabinete hay servicio de Logopedia….¿sabes lo que és? Aquí te lo contamos…


En muchas ocasiones nos encontramos sumidos en conversaciones en las que sale el tema de los hijos e hijas y alguien nos dice que su hijo/a “está acudiendo a un logopeda”. Nos quedamos un poco inquietos porque no sabemos lo que es exactamente un logopeda y a qué se dedica, y si nuestro hijo/a podría llegar a necesitarlo.
La Logopedia, aunque es una ciencia relativamente joven, se lleva desempeñando muchos muchos años por otros profesionales de la salud como son los médicos foniatras y en el terreno escolar, si hemos tenido contacto con el equipo de orientación vemos que existen los maestros de audición y lenguaje. Los logopedas, además de trabajar en colegios y centros educativos, también podemos ejercer a nivel clínico, por lo tanto, intervenimos con niños/as, adolescentes, adultos y personas mayores. Nos encargamos de prevenir, evaluar, diagnosticar y tratar todas aquellas alteraciones de la comunicación, del habla, del lenguaje y de la voz que nos podamos encontrar, bien porque existe una dificultad congénita, una lesión neurológica, porque hay una disfuncionalidad de los órganos bucofonadores o porque nos quedamos sin voz enseguida y al finalizar el día acabamos agotados…
A través de este blog os iré describiendo los trastornos y alteraciones con las que nos encontramos. Hoy os voy a describir brevemente cómo el niño/a va adquiriendo el lenguaje y sus principales hitos en el desarrollo del mismo:
El lenguaje es una de las conductas primarias que separa a los humanos de las especies animales, ya que este es el gran instrumento de hominización. Es una habilidad de gran significación en las oportunidades de éxito del niño en la escuela además de ser el vehículo, para la adquisición de nuevos conocimientos y es, por tanto, la expresión de su pensamiento.
El desarrollo del lenguaje implica muchos aspectos:
• Cognitivo: a nivel de la corteza cerebral donde se recibe, procesa y elabora la información y donde se ponen en marcha diversos procesos como la atención y la memoria.
• Social-afectivo: porque gracias al lenguaje se comunica y relaciona con otras personas de su entorno, permitiendo dicha interacción.
• Auditivo para la percepción auditiva adecuada y la comprensión del lenguaje.
• Motor: (aparato fonador) para la articulación de los sonidos y la adecuada expresión verbal.
En el desarrollo del lenguaje podemos distinguir dos grandes fases o etapas:
1. Etapa prelingüística: es la etapa en la cual se da la interrelación entre el niño y sus padres junto con todo el entorno que les rodea.
Comprende los primeros 10 a 12 meses de edad. Se caracteriza por una elevada expresión buco-fonadora.
-          De 0 a 6 semanas: el bebé modifica la succión al cambio de sonidos. Despierta ante ruidos repentinos intensos. Aparece la sonrisa social en torno a los 2 meses. Emite sonidos agradables y gorgoritos.
-          A los 6 meses: gira la cabeza hacia el origen del sonido. Le gusta jugar con objetos ruidosos. Emite vocales abiertas y consonantes. Usa la voz para atraer la atención. Ríe fuerte en torno a los 4 meses.
-          A los 12 meses: presta atención a su nombre. Comprende la palabra “no”. Responde a “dame”. Realiza emisiones fonéticas bisilábicas. En torno a los 11-12 meses dice las primeras palabras. Imita sonidos y juegos. Señala con el índice.
2. Etapa lingüística: Aproximadamente cerca del año de edad comienza la etapa lingüística, es decir el niño integra el "contenido" (idea) y la "forma" (palabra) a un objeto o persona determinada. El lenguaje propiamente dicho, se inicia por lo regular hacia los 18 meses: solo cuando el niño ha alcanzado esa edad se han desarrollado, funcionalmente, los centros o áreas corticales del lenguaje. En esta edad el niño/a cumple órdenes verbales simples. Comienza a decir oraciones de 2 palabras y va desarrollando patrones de entonación para preguntar.
De los dos a los tres años de edad se produce un incremento rápido del vocabulario, incremento que es mucho mayor que lo que ocurrirá posteriormente, llegando a tener un promedio de 896 palabras y a los tres años y medio 1222 palabras. El niño en sus expresiones verbales ya emplea verbos auxiliares "haber" y "ser" y da cierta prevalencia al artículo determinado. En el transcurso de esta edad comienza a utilizar las proposiciones y el niño ya tiene un lenguaje comprensible, incluso para personas ajenas a la familia, manifestando un dominio de la mayor parte de la gramática de su lengua materna (sintaxis), lo que denominamos período de la “competencia sintáctica”: cumple órdenes verbales complejas, identifica todos los objetos comunes, hace oraciones de más de dos palabras y usa su nombre.
Entre los  cuatro a los cinco años de edad, el niño domina virtualmente la gramática pero comienza a expresarse de acuerdo a un estilo "retórico propio". El niño suele estar ya capacitado para responder a preguntas de comprensión referentes al comportamiento social aprendido, dado que su lenguaje ya se extiende más allá de lo inmediato: comprende las “acciones”, conoce la función de los objetos, denomina imágenes en libros o dibujos. Es capaz de contar hasta 10.
De los seis a los siete años de edad la gran mayoría de niños y niñas se encuentra escolarizado y podemos hablar del desarrollo del lenguaje en esta etapa escolar, en la cual el niño manifiesta una madurez neuropsicológica para el aprendizaje y un lenguaje cada vez más abstracto. Debido al "dominio" del lenguaje el niño puede percibir distintas unidades lingüísticas dentro de una lectura o discurso, percibiéndolo como un todo. El niño/a supera también el período egocéntrico y su pensamiento se torna lógico-concreto. Ahora es capaz de tomar en cuenta los comentarios y críticas de los demás con respecto a su persona, lo cual no ocurría en edades anteriores. Esta capacidad de descentración hace que el niño tome conciencia de sí mismo, asumiendo un autoconcepto y una autoimagen adecuada o inadecuada, lo que influirá en su adaptación y desarrollo de personalidad.
Si observas en tu hijo/a, alumno/a, familiar…que no está adquiriendo correctamente los hitos en cuanto al desarrollo del lenguaje que hemos detallado en este escrito, no dudes en ponerte en contacto con nosotros, seguro que podemos ayudar a que tu hijo/a evolucione y sea en definitiva, feliz.


Beatriz Ruiz Hernández
Logopeda
Nº Col: 28/1047.

miércoles, 19 de septiembre de 2018

Etapas y comienzos


¡Buenos días! Como os contábamos la semana pasada, hemos vuelto a reactivar el blog y por ello ¡cada miércoles vamos a estar aquí!

Septiembre…mes de cambios, comienzan las rutinas, nuevos horarios o acostumbrarse a los de siempre, nuevos proyectos, nuevos retos, nuevas primeras veces….y con ello parece que va unido a su vez nuevos “rompecabezas por unir” puesto que no nos podemos olvidar que septiembre también es un mes en el que los más pequeños comienzan su andadura por la escuela infantil o el “cole”, una nueva etapa comienza.
¿Cómo lo llevará? ¿Se relacionará bien? ¿Comerá bien cuando se tenga que quedar en el comedor?  Y cuando esté enfermo ¿Qué haré? Miles de preguntas surgen en ese momento, la difícil conciliación.

Sentimos inquietud por nuestro hijo, por cómo le irá…para ello es importante hablar con ellos, sí HABLAR, probablemente si les preguntamos qué tal ha ido el cole su respuesta sea bien o mal…quizás sea una pregunta que abarca demasiadas cosas…Y si probamos ¿Qué es lo más te ha gustado en todo el día? ¿Qué has hecho en el recreo? ¿Cómo te has sentido hoy?

Y en relación a todo lo expuesto…en relación a los cambios en sus vidas y en las nuestras ¿Alguna vez te has parado a pensar en la importancia de expresar las emociones? Sin darnos cuenta normalizamos el hecho de saber que ha hecho hoy en el cole en lugar de saber cómo se ha sentido hoy.  Es importante que desde casa y desde el cole les ofrezcamos oportunidades para que sean capaces de identificar y regular las emociones así aprenderá a conocerse a sí mismo, a conocer a los demás, a ponerse en el lugar de los demás, tendrá buenas estrategias para resolver conflictos…Y ¿cómo lo puedo hacer? Pues bien, para ello os damos una serie de propuestas para nuestro día a día con los más pequeños y entre adultos. Tal vez la más importante sea tener en cuenta las opiniones y las emociones de los más pequeños, es fundamental escucharles valorar sus esfuerzos, los errores forman parte del aprendizaje y también las emociones.

Para terminar me gustaría destacar la importancia de las emociones, no sólo para ellos sino para nosotros, para los adultos. Actualmente, resulta imposible hablar de “rutinas de los más pequeños o sus comienzos” y no hablar de la difícil “conciliación”…de cómo nos sentimos nosotros o cómo se supone que nos debemos sentir. Estamos seguras de que hay multitud de opiniones al respecto…por ello dedicaremos un post a hablar sobre ello, estaremos encantadas de recibir vuestras propuestas u opiniones.
¡Feliz semana!

Ana Madueño
Psicóloga

miércoles, 12 de septiembre de 2018

¡Estamos aquí de nuevo! CES EDUCA. Gabinete de psicología y logopedia.


¡Bienvenidos! Antes de nada queremos presentaros el nuevo proyecto de CES EDUCA con el que estamos muy emocionados. Con la publicación de este post, con el que reactivamos el blog de CES EDUCA, queremos explicar lo que hacemos en el gabinete. Gracias a sesiones de psicoterapia, logopedia, estimulación, reeducación, entre otros servicios; pretendemos conseguir el máximo desarrollo en nuestros hijos (niños y adolescentes) desde un trabajo colaborador y multidisciplinar. Además, también ofrecemos ayuda, tanto psicológica como logopédica, a personas adultas que lo precisen, ya sea porque se encuentren desbordados por la situación o situaciones que estén viviendo y necesiten aprender nuevas formas de afrontar sus problemas, gestionar el estrés y sus emociones, etc.; o porque crean que este es el momento de dedicarse un poco de tiempo a sí mismos y al autoconocimiento.
¿Quiénes formamos el equipo del Gabinete de psicología y logopedia de CES EDUCA?
-          Laura Alonso: Psicóloga y Orientadora especializada en Inteligencia Emocional. Laura se encarga de ofrecer apoyo escolar y psicológico a niños y jóvenes, así como terapia a éstos y adultos. Además, impartirá talleres y programas de diversas temáticas.
-          Ana Madueño: Psicóloga especializada Forense y especializada en Atención Temprana. Ana se encarga de ofrecer terapia a niños, adolescentes y adultos; así como estimulación e impartición también de talleres y programas de diversas temáticas.
-          Beatriz Ruiz: Logopeda especialista en Logopedia Clínica y Escolar con amplia experiencia con niños/as, adolescentes y adultos en el ámbito de la educación no formal. Beatriz realiza evaluación e intervención de todo tipo de dificultades relacionadas con el habla, lenguaje, comunicación y voz tanto en niños/as y adolescentes como en adultos, así como estimulación e impartición de talleres y programas de diversas temáticas.
-          Alicia Jiménez: Educadora y maestra de educación infantil (modalidad bilingüe). Alicia se encarga de mostrar apoyo a niños en edades tempranas. Además, ha realizado diferentes cursos de inteligencia emocional y le gusta mucho trabajar a través de la pedagogía Montessori junto a otras, intentando que el niño sea partícipe en todo momento en su proceso de enseñanza-aprendizaje.
Hasta aquí nuestra breve presentación. Os esperamos con los brazos abiertos en Paseo Federico Melchor 3, en Getafe, para responder a cualquier duda o inquietud que tengáis sobre nosotros.

Laura Alonso Rodríguez.
Psicóloga.

miércoles, 26 de octubre de 2016

La Importancia del Apego II

El pasado post comenzábamos con una introducción sobre la importancia que tiene el apego desde que nacemos o la relación entre el apego infantil y las posteriores reacciones emocionales.

Hablábamos sobre Bowlbly, pionero en las teorías del apego, por ello y debido a su importancia me gustaría continuar por este “gran camino”. Seguro que en alguna ocasión habéis escuchado u oído hablar que existen diferentes tipos de apego. Bowlbly los clasificó de la siguiente  manera:

-          APEGO SEGURO
A través de este tipo de apego los niños tienden a percibir a sus padres o cuidadores como base segura, pudiendo cubrir y satisfacer sus necesidades fisiológicas, y emocionales. La persona “cuidadora” muestra sensibilidad, cariño y protección ante las señales del bebé, permitiendo así desarrollar un sentimiento de confianza y un vínculo positivo.

-          APEGO INSEGURO:
Apego resistente: el niño tiende a explorar poco mientras se encuentra con la figura cuidadora, tiende a responder con inquietud ante la separación, mezclando comportamientos de apego con muestras de resistencia o enfado (muestran una ambivalencia en su regreso). Suelen percibir a los padres como imprevisibles.

Apego evitativo: no muestran ansiedad ante la separación, evitando o ignorando el regreso de la madre. Este tipo de apego suele darse cuando el cuidador deje de atender las señales de protección del niño o bebé, por tanto, dejan de percibir a sus padres como base de seguridad o confianza.

Apego desorganizado: este tipo resulta de una combinación del apego resistente y evitativo. Ante este tipo de apego, los más pequeños se suelen mostrar confusos, desorientados o con ansiedad.

¿Qué repercusiones creéis que tienen los distintos tipos de apego en el desarrollo de los niños? ¿Cómo creéis que podemos estimularlo?  ¡El próximo post continuaremos por aquí!

“Todas nuestras vidas empezaron con el
afecto humano como primer soporte.
Los niños que crecen envueltos en afecto,
 sonríen más y son más amables.
Generalmente son más equilibrados.”
Dalai Lama
Ana Madueño
Psicóloga


viernes, 7 de octubre de 2016

La importancia del Apego

La primera pregunta qué podríamos hacernos es qué es el apego,  para qué utilizamos ese término…y así, la primera respuesta que podemos dar es que nos ayuda a definir la relación afectiva existente entre el niño y el adulto.
Seguro que en muchas ocasiones habéis leído u oído que desde que nacemos tenemos esa necesidad de contacto, de sentirnos protegidos y cuidados.
Pues bien, John Bowlby, pionero en las teorías de apego, definió la conducta de apego como “cualquier forma de comportamiento que hace que una persona alcance o conserve proximidad con respecto a otro individuo diferenciado y preferido. En tanto que la figura de apego permanezca accesible y responda, la conducta puede consistir en una mera verificación visual o auditiva del lugar en que se halla y en el intercambio ocasional de miradas y saludos. Empero, en ciertas circunstancias se observan también seguimiento o aferramiento a la figura de apego, así como tendencia a llamarla o a llorar, conductas que en general mueven a esa figura a brindar sus cuidados”.
Y no es menos importante destacar diferentes principios básicos que se han dado bajo esta premisa, tales como que todos los animales, incluidos nosotros (los seres humanos), buscamos la protección, el cuidado cuando no sabemos si estamos ante un peligro o amenaza…Cuando nacemos no sabemos si nos encontramos ante un peligro o amenaza, no sabemos si nos encontramos en un medio seguro o no, resulta “algo nuevo” para nosotros y buscamos ese piel con piel, esa búsqueda de protección.
 John Bowlbly hizo referencia a la relación causal existente entre el tipo de apego infantil y las posteriores vinculaciones emocionales. Es decir, quién son nuestras figuras de apego y qué podemos esperar de ellas; cuando los niños interiorizan los modelos de relación con sus figuras de apego, los mismos (modelos) les servirán de guía  para establecer otras relaciones significativas a lo largo de su vida.
            ¿Creéis en la importancia del apego? ¿Qué significa para vosotros?
En el próximo post hablaremos sobre los diferentes tipos de apego y ¡muchas más cosas!
“Cuando te acaricié, me di
 cuenta que había vivido
toda mi vida con las manos vacías”
Alejandro Jodorowsky
Ana Madueño

Psicóloga

jueves, 22 de septiembre de 2016

LOS HERMANOS

Probablemente los hermanos sean de las personas que más huella nos dejan. Compartimos la infancia, la adolescencia, cambios evolutivos, decisiones, aprendemos a compartir…crecemos “paralelamente”.
No resulta extraño que esta relación suponga un modelo para el resto de relaciones que tenemos a lo largo del tiempo.
Una cuestión muy habitual es cuando el hijo mayor deja de ser el centro de atención porque ha nacido su hermano, ¿qué se supone que pasa ahora? ¿Cómo se lo va a tomar? “Le veo diferente”…son algunas de las dudas más frecuentes. Pues sí, no os cuento nada nuevo si decimos que esta nueva situación puede originar celos entre los hermanos.
La relación que tienen los padres entre sí y con los demás influirá en la relación entre los hermanos. ¿No habéis observado como en las familias tiende a repetirse las formas de relacionarse generación tras generación? Sí unos abuelos tienden a reunir todos los domingos a toda la familia para comer, probablemente esta tradición la continúen sus hijos, los hijos de sus hijos…
Por otra parte si los padres son capaces de resolver los conflictos entre sí de manera positiva, transmitirán a sus hijos formas parecidas de actuar.
Resulta habitual si leemos cualquier estudio psicológico observar que los padres no suelen hablar de emociones a los hijos en la primera infancia, bajo estas circunstancias los hermanos más pequeños podrían buscar a los mayores a la hora de resolver algún tipo de conflicto.
Y vosotros,¿Qué opináis de la relación entre hermanos?

“La vida no es la que uno vivió
sino la que uno recuerda, y
 cómo la recuerda para contarla”
Gabriel García Márquez
Ana Madueño

Psicóloga