martes, 5 de noviembre de 2019

Inteligencia emocional


Las emociones son aquellas activaciones fisiológicas que sentimos en nuestro cuerpo ante determinadas situaciones, y que conllevan automáticamente generar un pensamiento sobre mí y las circunstancias.

            ¿Alguna vez alguien os ha explicado qué es la tristeza?. Damos por supuesto que desde pequeños nacemos conociendo y sabiendo gestionar nuestras emociones, pero eso es un gran error.

             Las emociones están en cada momento del día, ante cada situación, y provocan en nosotros un pensamiento, y por consiguiente, una conducta. Las emociones son las protagonistas en los momentos más importantes de nuestra vida, sin embargo, podemos relacionarnas de manera adaptativa con ellas, o puede ser la peor de nuestras pesadillas.

            Partamos de una premisa: NO HAY EMOCIONES NI BUENAS NI MALAS, todas tienen su función, lo positivo o negativo es la manera en la que reaccionamos ante ellas.



Cada situación, cada persona la interpreta de una manera diferente, y esto provoca en nosotros una reacción emocional.

            Es importante ser capaces de abrirnos a nuestras emociones. Es decir, estar abiertos a atenderlas y escucharlas. Además, el objetivo es saber identificar cada emoción y ponerle su nombre o etiqueta correcta, pues no es lo mismo sentir tristeza que sentir miedo.

            El paso más importante es la aceptación. Nos empeñamos en no querer sentir, en no permitirnos sentir las emociones negativas, porque parece ‘’que siempre hay que estar bien’’. Sin embargo, cuando dejo de luchar y acepto, y por tanto me permito sentir lo que estoy sintiendo, entonces puedo comenzar a relacionarme de manera adaptativa con mi emoción y a saber gestionarlas, y por consiguiente que nuestras emociones sean nuestras aliadas en la toma de decisiones, y no nuestras enemigas.

            ¿Qué nos dice cada una de nuestras emociones? Y ¿qué nos decimos nosotros?.

                                                                                              Psicóloga Silvia Sánchez

No hay comentarios:

Publicar un comentario